APERTURA
Beirutina: el auténtico sabor de la cocina libanesa en el centro de Sevilla
Se trata de un nuevo establecimiento que ha abierto recientemente en la calle Fernán Caballero donde sumergirse en la gastronomía del país mediterráneo y disfrutar desde brunch a almuerzos y cenas, pasando por cafés de especialidad

¿Qué tipo de sitio es? Beirutina es un restaurante que trae la cocina tradicional del Líbano al corazón de Sevilla. Su carta mezcla tradición y reinterpretación de platos típicos del país mediterráneo, un tipo de cocina donde se conjugan todo tipo de verduras y hierbas aromáticas frescas, legumbres, carnes con un toque especiado, aceite de oliva y panes caseros para untar y compartir, todo en un espacio diseñado para evocar la esencia de los cafés libaneses de los años 70, en una atmósfera minimalista y acogedora.
El restaurante abarca un amplio concepto gastronómico que incluye brunch y cafés de especialidad, permitiendo al comensal disfrutar de los sabores de su cocina en un amplio rango de tiempo y formatos.

¿Quién lo ha montado? El proyecto es liderado por Fourat El Achkar Gharios, una libanesa que llegó a España junto a su marido en 2006 cuando la situación en su país se hizo casi insostenible. Ambos son arquitectos de profesión y, después de vivir en Barcelona y pasar por ciudades europeas, como Londres, se establecieron en Sevilla hace 14 años.
Antes de abrir Beirutina, Fourat dio sus primeros pasos en la gastronomía organizando cenas privadas en casa bajo el concepto de «Grenillas dinners», una experiencia gastronómica que le sirvió de inspiración para este restaurante.
A través de él, encuentra una ventana en la que asomarse a los sabores de su infancia con recetas que la han acompañado desde niña, y que ahora, además de disfrutarlos, puede acercarlos al público local.

¿Qué hay en la carta? La carta de Beirutina se inspira en la cocina libanesa tradicional, con platos que fusionan sabores clásicos y toques personales. Para abrir boca destacan propuestas 'untables' como el hummus -en su versión clásica, de remolacha o con carne de cordero especiada-, mutabal (de berenjena y tahina), el labné (crema de yogurt con aceitunas negras), o ensaladas como el fatush y el tabulé. También se pueden encontrar fattés, bowls en capas con yogur, pan de pita crujiente y diferentes ingredientes, como berenjena asada o carne picada y piñones.


El horno de Beirutina es otro de sus protagonistas, donde se preparan las tradicionales man'oushes, una especie de pan plano libanés que recuerda a una pizza pero con un estilo propio. Se ofrecen con diferentes ingredientes, como zaatar (una mezcla de especias) queso halloumi, kafta (carne de cordero), shawerma de pollo o incluso, para quien quiera probarlos todos de una sentada, una opción degustación para compartir, es el Saruj, una masa de 70 cm y los cinco sabores de manouche.


¿Qué más se puede comer? Además de los platos mencionados, Beirutina ofrece algunas especialidades, como Wassouf (barquito de pollo y huevo), Um (tartar de berenjena), Manar (una boba de pan con queso halloumi al horno) o Safi (una flor de coliflor con ajo y cilantro).

¿Qué hay de postre? Los postres son una de las delicias que no hay que perderse, entre los que destacan el fondant de chocolate con nueces y pétalos de rosa o el knefek Beirutina, una especie de tarta de queso libanesa, especialidad de la casa, que consiste en una cazuela de queso fundido al horno con crumble crujiente de sémola y almíbar de azahar que sirven caliente y se ha convertido en todo un atractivo del restaurante. También ofrecen los tradicionales baklavas, ideales para acompañar sus cafés de especialidad.

¿Qué se puede beber? En la sección de bebidas, Beirutina incluye limonada libanesa, ayran (una bebida a base de yogurt), cervezas y una selección de vinos por copa. Entre ellos, destacan etiquetas como Can Estruc Xarel·lo, Javier Sanz y Massaya, un vino tinto libanés. Para cerrar, ofrecen el Café Blanc Libanés, una infusión aromática de azahar y miel.

¿Cómo es el local? El restaurante está cuidado hasta el mínimo detalle y, como buena arquitecta, Fourat ha participado en el diseño de cada rincón. Ladrillos vistos, cocina abierta desde la que saludar y recibir al comensal, haciendo gala de la hospitalidad de los países árabes, y un patio trasero con un olivo que aporta luz natural al espacio que nos traslada a las calles de Beirut. Su decoración mezcla mesas de mármol y madera maciza con objetos que recuerdan a los cafés libaneses, creando un ambiente que remite a la época dorada de Beirut en los años 70.


¿Dónde está? En la calle Fernán Caballero, 6.
Teléfono: 608 52 76 55
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete